jueves, 26 de febrero de 2015

Manantial de belleza

Su nombre lleva cielo
El que guía nuestro fervor,
Prodigio cuajado de amor,
Dios te Salve, Madre de Dios.

Ella, flor del celeste jardín,
La más humilde doncella,
Siendo entre las rosas, la más bella,
Rindiéndose ante Ella, sol, luna y estrella.


La humildad cubre su rostro,
Que reclina dando paz,
Llenando de consuelo el sendero,
En este día, de eterna Resurrección.

Su belleza, manantial de amor,
Repleta de un candor Inmaculado,
Junto a su Hijo, Jesús Resucitado,
Que luce, luz y grandeza.

Su nombre, sentimiento profundo
De dulzor y humilde grandeza,
Que es sinónimo de pureza
En este día, pórtico de alabanza.

Y de gloria viene Victoria,
Con llagas de Sagrado dolor,
Dios te Salve, Madre de Dios,
Prodigio cuajado de amor.

Nota del autor: me encantaria convertir este poema en canción